lunes, 31 de mayo de 2010

Sex and the City Style: Qué se yo a no se dónde!!!


Si hay algo muy cierto es que todas y cada una de las féminas me atrevo a decir llevamos por dentro a Carrie, Charlotte, Miranda y Samantha. Un poco de todas las mujeres de Sex and the city. Esa es mi teoría luego de interpretar y analizar la postura de varias de mis más queridas mujeres. Esas mujeres que son madres, hermanas, amigas, amas de casa, profesionales, hijas, amantes, jefas, soñadoras y por sobre todas las cosas seres humanos. No puedo ocultarles mi favoritismo por éste tipo de cintas, que si bien para la mayoría podría parecer algo frívolo y sin sentido, a mi me queda claro que es lo que en nuestra vida cotidiana ocurre aunque sea en sueño para algunas y en la realidad para otras.
Saben cuántas veces nos hemos querido largar a un lugar sin que nadie nos moleste y sin que sean escuchadas nuestras quejas? Y no me digan que es mentira, porque eventualmente cada una de nosotras ha querido obviar la realidad por un poco de diferencia, diversión y fantasía. Es más trasladando a la realidad la ficción, sería hasta saludable y maduro poder desordenar nuestra rutina y tener la capacidad de volver sin que sea afectada por cualquier episodio de nuestra desaparición momentánea.
A veces por el hecho de ser tan cuadriculadas en nuestras vidas es que no logramos escalar ese peldaño de la escalera, ese pedacito de cielo en la tierra que nos haría más feliz. Cuál sería el problema de tomar un avión sin siquiera haberlo pensado e irse un par de días a qué se yo ni no se dónde? Por qué somos tan poco capaces de creer que hasta de nosotras mismas necesitamos vacaciones? Hay momentos y etapas de las personas que lo único que necesitamos es silencio o incluso ruido pero desconocido. Es como colocar en una bolsa nuestras cosas, guardarlas y hablar con extraños, escuchar emisoras de radio distintas a las de siempre e incluso utilizar sabanas que no son nuestras. Saben que me encanta a pesar de no ser muy amante a los aviones poder contarle historias a gente que tal vez nunca vuelvas a ver. Escuchar cosas de los esposos, hijos y nietos de gente que es poco probable te encuentres en el mismo rumbo. De hecho creo que la mejor ida al psicólogo es montarse en un avión y conversar con personas absolutamente desconocidas. Escuchando cuentos de otros vemos lo de nosotros menos complejos o quizá con más opción a resolverse antes de lo previsto. Que divertido y excéntrico es cierto poder hacer cosas fuera de la rutina y lo que cotidianamente tenemos escrito en nuestra agenda. Hasta saludable para renovar y recobrar energía.
Definitivamente como diría Carrie o la muy sinigual Samantha ligada con Charlotte y Miranda puedo ser lo profunda y frívola que quiero dependiendo de la situación y lugar.

1 comentario:

Napoleon03@gmail.com dijo...

Eres extremadamente bella y femenina, Carolina. Saludos.
http://napoleon03.wordpress.com/