miércoles, 19 de marzo de 2008

Jim Carrey quiere contar como venció a la depresión


Quizá uno jamás quiera o pueda imaginarse que un hombre como Jim Carrey esté deprimido verdad ? Pues la verdad es que el protagonista de cientos de películas de buen humor y comicidad padeció una de las enfermedades de fin de siglo más comunes entre las personas de ésta era.

Jim Carrey ahora mismo se encuentra en un momento de su vida, en el que se ha envuelto más en temas terrenales y es por ello que quiere contarle al mundo su experiencia dentro y fuera de los fármacos.

Así como suena de terrible y producto del estrés y la falta de canalización de las emociones éste artista estuvo bajo prescripciones medicas durante mucho tiempo. Sus nervios y la falta de sueño lo estaban agobiando, entre otros eventos.

En el mejor momento de su vida, el comediante tuvo una crisis que lo alejó de la realidad y lo puso a la orden de las medicinas indiscriminadamente, al punto de no tener ganas de vivir, ni de pensar en lo maravilloso que lo esperaba.

Antidepresivos fue lo que estuvo tomando durante meses y según palabras del propio artista fue lo peor que le sucedió en toda su existencia, pues dependía de ellas .

De hecho sus palabras exactas fueron: “Durante algún tiempo me trataron mi enfermedad con Prozac y en un principio funcionaba, pero al final no me curaba el enojo y la frustración. Creo que tenemos un problema real en que todo lo tratamos con un fármaco. Me parece que hay toda una nueva forma de curar la depresión que no requiere de drogas, y estoy escribiendo un libro acerca de ello”

Otra vez comprobamos que las medicinas de ésta naturaleza no son el canal más adecuado para tratar anomalías como la depresión ni la ansiedad. Me encanta ser ahora vocera por decirlo a título personal de noticias como éstas de Jim Carrey.

1 comentario:

Unknown dijo...

Que complicada es la depresión. Todos estamos expuesta a esa enfermedad, es a veces una lucha diaria para no ser dependiente de farmacos ni de profesionales que solo le importa el dinero que le saca a su paciente para brindarle unos minutos de tiempo.
Triste es la experiencia de la depresión.
Mis saludos, una depresiva que sabe sobrevivir a pasar de querer morir.