Saben que al leer noticias como estas: “Mel B quería que Eddie Murphy conociera a su hija”, sé a la perfección qué se siente. Y es por ello que quisiera conocer a "Mel B" y decirle que cada persona está en su derecho de tomar las verdades de la vida como mejor le parezca. El amor no se exige!
Todos sabemos que el actor Eddie Murphy, luego de verificar si era el padre de la hija de la cantante británica, nunca ha querido asumir su rol de padre como supuestamente nos enseñaron.
Esa historia de estos artistas de Hollywood la sabemos desde que empezó y muy bien. Se gustaron,salieron juntos, tuvieron un romance apasionado y procrearon una baby. Ya lo demás harina de otro costal como dicen.
Quien puede obligar a otra persona a querer a otro ser humano así sea un niño? El afecto no se RECLAMA y es allí cuando estoy en desacuerdo con la artista de las Spice Girls.
Tengo entendido según leí, que el comediante Eddie Murphy no se presentó a la audiencia efectuada la semana pasada referente a la paternidad de Angel Iris, quien ya tiene 7 meses y eso fué lo que despertó la rabia de la bella morena.
Melanie Brown, está furiosa con la actitud de su ex pareja, quien ha dicho que no pretende conocer a la niña porque no es de su interes, así suene my fuerte. Murphy se hará responsable de los gastos y de la pensión como manda la ley en USA, pero no quiere ejercer su paternidad afectiva. O sea digo yo: quien le obliga a querer a su hija? Eso no es obligado, se siente o no se siente y punto.
Claro está, me da pena por Murphy que sea tan egoísta e inmaduro para meter a un angelito en medio de disputas de adultos. A veces me pregunto cómo es posible que la gente sea así.
Claro que inmediatamente me digo que es una cuestión de valores y principios que no se compra en Beverly Hills ni en un mercado barato, no se compra en ninguna parte.
Ahora bien no es un secreto para nadie que el conocido actor fue obligado a realizar la prueba de ADN y por consiguiente a pasar una pensión que aún no se sabe cuánto será la suma que deberá pagar mensualmente o como sea impuesta.
A veces cuando veo estos casos, se que una como madre quisiera que los hijos de una no tuvieran que vivir historias como estas y tener que decirles un día que tienen un padre que les pasa dinero, pero no los quiere como hijos. Pero qué se puede hacer? Es cuestión de asumir las cosas de la vida como vienen.
Soy una convencida que los niños no se traumatizan si uno les dá las directrices y las normas. Es mejor criarlos con la verdad por delante. Es saludable siempre poner la verdad en la mesa tanto como los puntos sobre las “ies”.
Y saben que? El tiempo de Dios es perfecto. Y padre no es el del ADN, sino el que cría, el que forma, el que da el afecto y el cariño sincero. Yo conozco muchos “padres de cheque” que sólo dan dinero y no afecto y la verdad no importa, porque la vida es una sola y cada quien sabe como actúa en la vida.
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