lunes, 14 de enero de 2008

"Ahora o nunca" no hay tiempo que perder


Seguro tú que estas leyendo no podrías decir que en esos momentos en los que te pones a analizar sobre la vida y la muerte, no piensas sobre aquello que quisieras hacer si te faltaran meses para morir.

Creo que éste fin de semana me ví una de las mejores películas que he visto en mi vida. Que si soy cursi, romántica y soñadora? Seguro que sí, para qué negárselos.Su título original “The Bucket List” y seguramente su nombre en español será “Ahora o Nunca”. En efecto se trata sobre aquellas cosas que harías justo antes de morirte.


Y la verdad desde el primer bloque de secuencias ya estaba enamorada de la historia.Con Warner Bros a la cabeza y con Rob Reiner de director y Justin Zackham como escritor del guión, estrellas de la magnitud de Jack Nicholson y Morgan Freeman lograron no sólo apoderarse de la taquilla estadounidense éste fin de semana, sino de los corazones de quienes somos unos soñadores empedernidos.




Imagínate que te quedan meses de vida y que tienes una enfermedad terminal, de eso se trata la película. De dos señores mayores que se conocen en una circunstancia muy poco común y deciden hacer todo aquello que quieres hacer antes de pasar a otro plano.


Morir en cuerpo es verdad, pero jamás en alma y esto fue lo que vimos en la cinta “Ahora o nunca” en cada escena. Una hermosa historia de vida que nos muestra como dos hombres en sus setentas avanzados empiezan a vivir lo que falta con la pasión de unos quinceañeros.


A ambos le dan poco tiempo de vida, pero enfermos y todo como se encuentran, enfrentan la noticia de su próxima e inevitable muerte, viviendo a plenitud y sólo muriendo pero de las risas. Una lección de vida definitivamente.


En lugar de seguir vomitando por las drogas del cáncer y estar encerrados juntos a enfermeras y doctores, estos dos hombres de diferentes niveles de vida deciden recorrer el mundo y llevar a cabo la lista de sus últimos deseos.





Lanzadas en paracaídas, carreras de carros, comer caviar hasta el cansancio, jugar al póquer en Monte Carlo, no pensar en el reloj , reír hasta llorar, hacer algún bien por alguien y pare usted contar, llenaron la lista.

Desde los más vanal, frívolo y humano hasta lo más profundo se manifiesta en la carta, llena de cosas por hacer. Tanto así que hasta el beso a la mujer más bella del mundo no podía faltar, por aquello de hacerlo todo.


Mi sugerencia muy humilde, es que en el lugar del mundo que vivan, no dejen de ver ésta cinta. Es un drama-comedia que no dejaras que pase por tu vida desapercibida. Perdonen la pasión, pero créanme que al salir de la sala de cine lo que deseaba era correr a darle un beso a la mujer más bella del mundo: mi hija Bárbara Camila.






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