miércoles, 25 de julio de 2007

QUIEN MATA A HIERRO...








Dice un popular dicho que: “quien mata a hierro no puede morir a sombrerazos”. Y esto lo menciono, por los fuertes rumores que circulan desde hace semanas sobre la fractura del amor de mi Brad y la Angie.

Los rumores de que la afamada pareja denominada “Brangelina” ya no es más un dúo, ni una dupla perfecta crecen considerablemente, pues la paciencia de la diva ha llegado a su fin y la complacencia del guapetón no ha salido a relucir.

Angelina Jolie, quien llegó a los brazos de Pitt, luego de muchas relaciones tormentosas y con un pasado lleno de excentricidades ha sido la pareja de Brad durante todos estos años de controversia.

Si hacemos un breve paseo al pasado, podemos encontrar que la realidad, es que Angelina llego a la vida del actor en cuestión, cuando éste estaba unido a quien fuera su esposa legal Jennifer Aniston.

He sido una fiel creyente que todo lo que empieza mal termina mal y que todo aquello que se inicia bajo el dolor de otra persona, no está bien ni tiene mucho futuro.

Y lamentablemente la relación de la denominada pareja “dorada de Hollywood”, es que comenzó contra viento y marea y con muchos ojos encima, básicamente porque Pitt se encontraba casado con otra famosa.

Si también es cierto que no se mandan en los sentimientos, debemos ser conscientes que a veces debemos controlarnos para no hacer lo que no NOS GUSTA QUE NOS HAGAN.

Al parecer todo indica que Angelina se está sintiendo como ella hizo sentir a Aniston en aquellos dias de su romance escondido con el super Brad.

Luego de un encuentro entre los ex esposos Brad y Jenn, Angie entro en furia y armo un escandalo porque su marido le mostro a Shiloh, la hija de ambos a la ex esposita.

De hecho el sitio de internet “Entertainment Wise”, ha reseñado que la pareja ya está separada. Asegurando incluso que la decisión fue confirmada por amigos de la pareja.

Las palabras que me mencionan en estos dias entre los más bonitos de Hollywood, en lugar de ser brillo, glamour y alfombras rojas, son peleas, distanciamiento, furia, frustración, ruptura y separación.

Verdad o mentira, no sabemos. Pero cuando “el río suena, piedras trae” eso si es seguro. Ya sabremos qué sucederá y pues una vez más: “Quien mata a hierro, no puede morir a sombrerazos”.

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