martes, 22 de mayo de 2007

Dónde está mi Bachelor igualito a éste? jajjaja

Debo referirles que desde que vivo en Estados Unidos me hecho adicta a varios de los seriados de realidad en donde vemos episodios de la vida diaria de alguien más.

Por mencionarles algunos de mis favoritos: “American Idol”, “ Dancing with the Stars” , “The America’s next top model” y “The Bachelor”. Es decir del que me quede pegada soy fanática, por asi decirlo.

Ayer mientras veía la semifinal de “Dancing with the stars” que por cierto termina hoy al igual que American Idol , me topé con “ The Bachelor “ en su décima edición que ya llega a su fin como es usualmente por ésta época.

Cuando empiezo a ver quien era el soltero codiciado de ésta temporada, casi me desmayo, no lo pude evitar. Me recordó inmediatamente una de mis películas favoritas de todos los tiempos “Reto al destino” protagonizada por Richard Gere.

En ésta oportunidad el soltero que debió elegir a su prometida era nada más y nada menos que un chico de nombre Andy Baldwin. Un oficial de la marina de treinta años, proveniente de Lancaster, Pennsylvania y con un hogar hermoso. Sus padres llevan casados 36 años y sus abuelos sesenta años de matrimonio, por mencionar algunas de sus múltiples cualidades.

Andy se ve fabuloso por dentro y por fuera, saludable, deportista, caballero, discreto y muy educado. Si nos ponemos a imaginar a un príncipe, seguro lo veríamos a él. Ni muy alto, ni muy flaco, ni muy cómico, ni muy serio, o sea estupendo. Como me lo recetó el doctor.

Es que no les puedo explicar, Andy es ojis azules, dientes blanquisimos y derechitos, con abdominales hasta en la lengua y con un conjunto de personalidad y físico de muerte lenta, jajja.

Sé que les suena frívolo o vanal todo esto, pero hablo como cualquier muchacha a quien le hubiesen leído “Cenicienta” o “Blanca Nieve” cuando recién aprendia a caminar.

Bueno la verdad que mientras disfrutaba de lo que estaba siendo el capítulo final de “Bachelor” veía como dos jovencitas trataban de quedarse con el maravilloso anillo de compromiso que las llevaría al altar con el espectacular Andy.

Las citas románticas que adornaron el camino a la elección final del galán, dieron envidia de la buena, a todas las bobas ilusas que nos encontrabamos viendo el show de la cadena ABC.

Es que estaba todo tan bien concebido que cada instante de lo que sucedía en la pantalla chica era lo que a cualquier mujer le gustaría vivir con el hombre amado: cabalgata a la orilla del mar, nadar en Hawai, vista desde un helicóptero de la ciudad, cena a la orillita del mar, comida en la cama de un hotel ultra uff y pare usted de contar.

Claro todo estaba preparado y calculado para que hasta la más dura se enamorara inmediatamente y para más colmo un super papacito de “Príncipe” a quien por ética visual no le dirías "NO" jamás, jajajja.

El caso es que finalmente, llegó la hora del anillo, yo tenía mis reservas. Andy se sentía confundido, pues una de las jovencitas era más abierta, espontánea, directa, super buen cuerpo, divorciada y divertida. La otra más discreta, sofisticada, dulce e inteligente, eran los dos lados de la moneda.
Aún y cuando supuse en algún momento que mi Andy se iba a quedar con la muchacha que lo mataba y que le daba la química espectacular que hacia que le dolía el estomago, Andy se quedó con la más apropiada, bonita y dulce de la historia.

Yo no quería que eligiera a nadie y poder mezclar lo que le gustó de ambas y poder ser esa que él adoraría, desearía, soñaría y quería para mamacita de sus babys. Es que me declaro fanática de los músculos de Andy, también de su cerebro, de sus ojos, de sus manos y de toda su humanidad. Jajjajaja

Vieron que todo no es poesía. Es que de vez en cuando se me sale la que alguna vez fui jaajja. Diviértanse tanto como yo con éste texto. Más broma que otra cosa.

No hay comentarios.: