martes, 1 de mayo de 2007

SEDUCIENDO A UN EXTRAÑO

Me fuí al cine en estos días porque la verdad tengo un montón de películas atrasadas como digo yo. Soy una cinéfila sin tiempo porque mi labor de madre me reclama y pues cuando me voy al cine me disfruto esos minutos a plenitud.

El caso es que vi recientemente la película “Perfect Stranger” con Halle Berry y Bruce Willis. Obviamente atraída por el casting y la trama en promoción desde hace meses me metí de lleno en el relato dirigido impecablemente por James Foley.

El denominado por muchos como “sexy thriller” de Revolution Studios, “Perfect Stranger” o “Seduciendo a un extraño” pregunta lo siguiente: ¿Qué tan lejos puedes ir para poder guardar un secreto?

La verdad que les recomiendo el film porque desde que se inicia usted no despegará los ojos de la pantalla. Actuaciones impecables y cargadas de mucha acción. Misterio, mentiras, omisión de información y mucho más caracteriza a ésta cinta.

Halle Berry como de costumbre nos mantiene atentos a sus movimientos, pues cuenta no sólo con su belleza sino con su talento. Esta galardonada actriz afroamericana, escenifica a Rowena Price en donde nos muestra otro de sus rostros. Fusionando su talento y belleza vuelve a ganarse el aplauso de quienes la hemos visto crecer cada día como profesional.

Por su parte Bruce Willis con sus años encima y sus canitas bien platinadas, al interpretar a Harrison Hill le da ese toque de elegancia y sensualidad a la trama que lleva sobre sus hombros.

La trama gira entorno a la reportera investigadora Rowena Price (Halle Berry), quien se entera que el asesino de su amiga puede estar conectado con el ejecutivo de publicidad Harrison Hill (Bruce WIllis).Ella decide astutamente cambiar de identidad para ayudar a su socio, Miles Hailey (Giovanni Ribisi) y de ésta manera hacer justicia y delatar al culpable.

Para no seguir dándoles pistas de la película, vayan con sus sentidos bien abiertos y presten mucha atención porque se sorprenderan al saber qué somos capaces de hacer cualquier cosa por guardar un gran secreto.


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